viernes, 15 de noviembre de 2013

ACTIVIDAD FÍSICA Y EJERCICIO FÍSICO TERAPÉUTICO

En términos generales, la práctica de ejercicio físico es un factor importante para mantener el bienestar, ya que se presenta como agente terapéutico efectivo para el mantenimiento y la rehabilitación de desórdenes musculoesqueléticos, cardiovasculares y neurológicos.
Realizar de forma habitual ejercicio, promueve la salud y contribuye
a aumentar la expectativa de vida de quien lo practica. Múltiples estudios han demostrado que realizar actividad física de forma regular mejora la función mental, la autonomía, la memoria, la rapidez, la fuerza, la imagen corporal y la sensación de bienestar, pero hay que tener en cuenta que existen grupos de personas que, bien sea por edad o por una patología asociada, necesitan un programa de ejercicio especializado, especifico y controlado bajo la supervisión de un profesional.

Beneficios del ejercicio

Todos los beneficios del ejercicio son esenciales para una vida sana. Todas las personas deberían incluir en su vida una rutina de ejercicios, ya que por sencilla que sea, se apreciarán beneficios para la salud. Algunos de estos son:
  • Mejora la apariencia
  • Mejora las funciones corporales
  • Mantiene el peso adecuado
  • Alivia la tensión y el estrés
  • Mejora la coordinación
  • Aumenta la atención mental
  • Aumenta la fuerza
  • Aumenta la resistencia
  • Mejora la postura
  • Aumenta el estado de bienestar general
  • Recrea

El ejercicio es una herramienta para vivir mejor día tras día. Nos da armas para sobrevivir mejor y para tener una vida más saludable.

Dentro de los efectos positivos del ejercicio encontramos:
  • Mejora el equilibrio y la coordinación
  • Mejora el tono y la resistencia muscular
  • Mantiene la amplitud de movimiento y flexibilidad
  • Oxigena todo el organismo
  • Elimina toxinas
  • Incrementa la fuerza cardiaca
  • Mejora la percepción y la memoria

Ejercicio Terapéutico

La actividad física terapéutica consiste en realizar ejercicios y movimientos corporales que persiguen restituir la función normal o conservar un estado de bienestar.
Debe de desarrollar un programa específico para cada paciente de acuerdo a sus necesidades, por lo que es considerado de carácter individualizado, pero tiene el propósito de restituir, conservar o mejorar aquellas capacidades físicas mermadas por la enfermedad o lesión.
Desde hace un año estamos llevando a cabo un programa de estas características en el Centro Cultural de la Mujer de San Antolín en Murcia en el que las sesiones se desarrollan en pequeños grupos de 8 a 10 personas. Está destinado a pacientes de fibromialgia y síndrome de fatiga crónica, pacientes con enfermedades crónicas, lesiones y secuelas de intervenciones quirúrgicas o accidentes. Los resultados obtenidos son óptimos, tanto por los beneficios de este tipo de actividad a través de los ejercicios específicos programados atendiendo a las características individuales de cada participante o paciente, como por el componente anímico que conlleva su puesta en práctica cada día.


¿Qué ejercicio realizamos?

Es difícil indicar qué ejercicio concreto está asociado a una mejora específica en una persona que sufre una enfermedad o lesión, ya que, en muchas ocasiones, los síntomas cursan de forma diferente para cada individuo. En términos generales, un Programa de Actividad Física debe incluir:

1- EJERCICIO AERÓBICO (caminar, trotar, nadar, bailar, pedalear…):
  • Disminuye la presión sanguínea. 
  • Baja los niveles de colesterol total en la sangre, así como los de colesterol LDL o "colesterol malo" y de los triglicéridos y aumenta el colesterol HDL o "colesterol bueno", reduciendo el riesgo de un ataque cardíaco. 
  • Reduce los niveles sanguíneos de glucemia en los diabéticos. Al practicar un ejercicio aeróbico, utilizamos glucosa, la cuál proviene de la sangre. De esta manera los niveles de glucosa en la sangre disminuyen y los diabéticos se pueden ver beneficiados con esta práctica. 
  • Mejora la capacidad pulmonar, la circulación en general y el aprovechamiento del oxígeno no solo por los músculos (incluyendo el músculo cardíaco), sino también por los órganos internos y la piel, lo cual se refleja en mayor capacidad para realizar esfuerzos y mejoría en las funciones digestivas, renales, inmunológicas, endocrinas, el estado de ánimo, el sueño y de las funciones mentales superiores. 
  • Reafirma los tejidos y la piel recupera parte de la lozanía perdida, contribuyendo no solo a estar y sentirse más joven sino también parecerlo. 
  • Reduce la mortalidad cardiovascular. 
  • Aumenta la reabsorción de calcio por los huesos, fortaleciéndolos y disminuyendo el riesgo de fracturas. 
  • Disminuye los niveles circulantes de adrenalina, la hormona del estrés, y aumenta los niveles de endorfinas y otras sustancias cerebrales, contribuyendo a bajar la tensión emocional y mejorar el estado anímico, lo cual se refleja en una gran sensación de bienestar físico, emocional y social. 
2-  EJERCICIO PARA  LA  FUERZA MUSCULAR:
  • Al desarrollar los músculos y la fuerza de los mismos, los órganos internos mantienen sus correctas posiciones y su funcionamiento se optimiza, mejorando la digestión, el tránsito intestinal. la respiración y la salud cardiovascular.
  • Mejora  la postura, porque los músculos implicados en el mantenimiento de la posición erguida se encuentran bien tonificados.
  • Aumenta el gasto de calorías, al incrementar la masa muscular se eleva el metabolismo basal y el cuerpo quema más calorías, aún estando en reposo.
  • Previene lesiones, ya que unos músculos fuertes y desarrollados no sólo potegen a las articulaciones, sino que ejecutan de mejor manera cada movimiento evitando molestias por malas posturas y resisten en mayor medida trabajos intensos, lo cual reduce el riesgo  de ciertas sobrecargas.

3- EJERCICIO PARA  MEJORAR LA AMPLITUD DE  MOVIMIENTO Y FLEXIBILIDAD:
  • Mejora la apariencia física, porque no sólo favorece la correcta postura corporal sino que tonifica evitando flaccidez y ubica de mejor manera cada uno de los músculos, que al estar firmes, mantienen su posición adecuada.
  • Mejora de la postura: generalmente las personas tienen la parte baja de la espalda más acortada, por los que limite en gran medido el rango de movimiento y produce molestias. Con el trabajo de flexibilidad lo que se busca es que desaparezca tal acortamiento y devolver la libertad de movimiento.
  • Aumento del rango de movimiento disponible en las articulaciones: ya que con la edad puede afectar a la calidad de vida.
  • Previene lesiones.
  •  Facilita el riego sanguíneo de los músculos: ya que un tono muscular elevado dificulta la circulación de la sangre por el músculo y aumenta la presión arterial.
  •  Disminuye la aparición de dolor muscular después del ejercicio: facilita el aporte de nutrientes y oxígeno lo que provoca una rápida recuperación.
  •  Disminuye los efectos del estrés: disminuye el tono muscular produciendo así una relajación tanto física como psicológica.

4-  EJERCICIO PARA  MEJORAR EL EQUILIBRIO:
El equilibrio físico es una resultante del entrenamiento global de las demás cualidades físicas pero también objetivo que concentra en él la percepción de la postura corporal. A medida que vamos mejorando en esta cualidad logramos una percepción espacio-temporal que nos permite ser más ágiles pudiendo responder así ante diferentes contratiempos como mareos, tropiezos  o caídas.

1 comentario:

fibrofamur dijo...

Dani, eres nuestro preparador físico preferido. Gracias por hacernos tan llevaderas las sesiones de Ejercidio Físico Terapéutico. Con tu buen hacer muchas de nosotras, que ya habíamos arrojado la toalla, nos hemos enganchado a esta actividad que tanto contribuye a nuestra mejoría. El boca a boca nos va acercando a más personas que lo necesitan. Esperamos que cada vez ean más las que logren beneficiarse de esta actividad.

¡Estamos en ello!